lunes, 31 de octubre de 2011

ETAPAS DEL DESARROLLO SEGÚN FREUD.

Fase oral (0-1 años)Durante el primer año de vida posnatal, el origen principal de la búsqueda de placer y al mismo tiempo, de conflicto y frustración es la boca.
Explora con la boca, chupa y muerde, no sólo para comer, sino también por que  obtiene placer.
Durante esta fase el niño depende totalmente  de la madre, se produce un proceso en donde se identifica con su madre, lo que es importante para la formación de la seguridad.
Su afectividad se caracteriza por una discontinuidad de sentimientos.


ORALIDADLa diversión que obtiene el niño de chupar, morder, mascar y vocalizar se ve restringida muy pronto por los que lo cuidan, la madre está pendiente cada vez de que el niño se chupa el dedo o mordisquea juguetes. Es criticado y castigado, si no se somete y es recompensado por hacerlo cuando los demás quieren.
Así es como el niño encuentra por primera vez el poder de la autoridad en su vida, una autoridad que permanentemente le limita su búsqueda de placer. Él bebe llora porque necesita y el otro da, es una relación “absorbente” (Dominante, que trata de imponer su voluntad a los demás) por necesidad. Si la persona queda muy fijada en la oralidad habrá un deseo de “extraer algo” (sacar provecho de los demás), demandantes, dependientes e  insatisfechos


FASE ANAL DE 2-3 AÑOSEl interés se desplaza de la región oral a la anal. Se distingue dos fases:
Una activa - Anal expulsiva en la que el niño siente placer con la expulsión de sus heces.
Una pasiva - Anal retentiva disfruta con el dominio de los músculos del esfínter reteniendo su expulsión. Su afectividad sigue caracterizándose por la discontinuidad de sentimientos, a partir de los 2 años y medio comienza a emerger el YO, se va haciendo más constante en sus afectos. Se le pide al niño el control de esfínteres, o sea, que madure. En este proceso, el niño puede frustrar o complacer al adulto. Lo que importa es el control y el dominio sobre el otro.



Fase fálica (3-6 años)El niño se interesa por sus órganos genitales y por las diferencias entre los dos sexos.
Desde el punto de vista afectivo lo más importante es que aparece el complejo de Edipo caracterizado por una atracción hacia el persona del sexo opuesto, a la vez que considera al de su mismo sexo como su rival.


Es el núcleo de la neurosis,  “la angustia de castración”  es un fenómeno importante para la estructura de la personalidad.
Ocurre alrededor de los tres años porque la criatura se interesa por la zona genital, por quién tiene o no tiene pene (lo observable externamente ya que sólo reconocen como real lo que se ve).
Ven que hay diferentes generaciones (grandes y pequeños) y una diferencia de sexos (masculinidad y feminidad).
El que sea patológico (Que tiene características de enfermedad) o no, dependerá de cómo se    supere la etapa edípica
El énfasis está en el tipo de relación que van adquiriendo en sus primeros años de vida.
EDIPO
En la niña se produce una decepción debida a la falta de pene que le hace separarse de la madre (por no dárselo) y toma interés por el padre.
La situación que vive con la madre es ambivalente y tiene miedo a renunciar al amor de la madre.
La herida narcisista se superará cuando da a luz un hijo (algo que el otro sexo no puede hacer).
La madre es el primer objeto amoroso de ambos porque es quién calma y consuela.
La niña descubre que tampoco tiene pene y entra en una situación triangular viendo al padre con interés entrando en la fase edípica.El psiquismo humano se va construyendo en un proceso de relación a través    del cual el otro es vivido y representado a través de quién hace la función de padre y madre.


Fase de latencia (6-pubertad): Es un período estable en el que los intereses sociales y culturales aventajan a los de los instintos, que entran en una fase de reposo o latencia.
En el plano afectivo se produce una ordenación de los sentimientos.









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